Hoy en el viaje de regreso a la casita, oí una conversación, más o menos así:
- Hola Fulano* siéntate en la silla de atrás.
- No, es una silla para discapacitados.
Me quede pensando ¿Qué hps pasa si se sienta?, y termine pensando en que no estoy de acuerdo con este sistema de “silla azul”; ni siquiera azul en todos los casos así que llamémosle “silla diferente”.
Lo primero es eso de que uno no debe sentarse en esa silla, ¿en verdad debemos ir de pie por que la silla es diferente? ¿Que hace Ud. en la situación de no encontrar más sillas disponibles? Ud. estando en plenitud de condiciones ¿se sienta en la silla diferente? Yo por mi parte, si lo hago.
Yo creo que esto de la silla, en vez de ser una solución, es una representación de un problema que es la discriminación, me parece que no debería hacer falta una silla para recordarle a la gente que deben ser generosos, y tampoco para encasillar a las otras personas como “diferentes”.
Ahora, no niego que hay personas que por una condición temporal o permanente merecen ir sentados, diga Ud. Una mamá o papá con su hijo o hija en brazos, una mujer en estado de embarazo, una persona que camina con ayuda de muletas, una persona mayor o una persona muy joven (pienso que merece más una silla un niño o niña pequeño que un adulto), incluso, merece el asiento una persona que esté muy cargada de cosas (o por lo menos que ayudemos a llevar dichas cosas).
El verdadero problema surge en el momento en que ese alguien realmente merece ir sentado o sentada, y absolutamente nadie cede la silla.
Como reflexión personal, si te subes a un bus, siéntate en la silla que esté disponible, sea del color que sea, y si puedes y quieres cederle el asiento a otra persona (Independientemente de la razón) hazlo.
*Nombre cambiado para proteger la identidad del zopenco.